martes, febrero 07, 2006

Las largas de la LOE


Parece que en el Senado se ha frenado un poco la carrera imparable de la nueva ley orgánica de educación. Parecía un inexorable cumplimiento de plazos, como si no hubiera suficiente tiempo, todo debía hacerse a la carrera y, de repente... Se pospone el debate de las enmiendas.
¿Habrá llegado la cordura a nuestros representantes? ¿Se han impuesto un momento de reflexión antes de cometer un dislate? ¿Habrá caído alguien en la cuenta de que no tiene sentido hacer una ley sin el consenso básico suficiente, que sólo sería una invitación a un gobierno de otro color político para cambiarla?
Esperemos que sí. Por el bien de todos, sobre todo por el de nuestros niños y jóvenes, que son quienes "sufrirán" la ley educativa que llegue. Y nosotros, porque nuestro futuro depende de ellos y de la educación que reciban, así como de su cultura o incultura religiosa. Los hechos parecen demostrar cada día más claramente que la incultura religiosa conduce al fanatismo. El futuro está ahora en el tejado del Senado.